Con la llegada del invierno, las guardias médicas ven un aumento significativo de casos de resfríos, gripes, bronquitis y neumonías. Aunque el frío no causa las infecciones, sí crea el ambiente perfecto para la propagación de virus y bacterias. Niños pequeños y adultos mayores son los más vulnerables, y los especialistas insisten en la vacunación y los cuidados para evitar complicaciones.
