Viajar en Buenos Aires: ¿Qué hacer si me robaron la tarjeta SUBE?

Perder la tarjeta SUBE puede ser un verdadero problema si se el uso de la misma es diario en el transporte público en la Ciudad de Buenos Aires , el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) o en el resto del país. Pero, en caso de que la SUBE estuviera registrada, la solución está a solo unos clics o llamados. Darla de baja es clave para proteger el saldo y poder asociar una nueva tarjeta sin demoras.

La forma más rápida de darla de baja es ingresar a la cuenta desde Mi SUBE o a través de la app  SUBE y, una vez realizada la baja, se puede asociar una nueva tarjeta desde el mismo perfil. También está la opción de hacer el trámite de forma presencial en cualquiera de los Centros de Atención SUBE con el DNI , o llamando al 0800-777-7823, opción 1, disponible las 24 horas, cada día.

Una vez que se complete la solicitud, la persona recibirá un correo electrónico en un plazo de 72 horas hábiles con la información sobre el saldo y los pasos para recuperarlo. En caso de que el mail no llegue, otra alternativa es consultar directamente llamando a la línea gratuita SUBE y marcando la opción 3.

Es importante saber que, si se llega a recuperar la tarjeta  que se dio de baja, no hay que cargarla y, ni siquiera intentar usarla, ya que está en proceso de bloqueo. En tal sentido, cualquier uso posterior puede impedir que se emitan reclamos o se recupere el dinero.

¿Cómo registrar una nueva SUBE y recuperar el saldo?

Una vez que se de de baja la tarjeta anterior, lo ideal es asociar cuanto antes una nueva SUBE a la cuenta para que el sistema pueda transferir el saldo. Para hacerlo, se debe ingresar al perfil de Mi SUBE, elegir la opción "asociar nueva tarjeta" y seguir las instrucciones. Vale recordar que el proceso de reintegro puede tardar algunos días hábiles.

El registro también permite acceder a otros beneficios  como tarifas sociales, historial de viajes y reportes de saldos. Si aún no se hizo este paso, crear una cuenta SUBE es gratuito y muy útil frente a cualquier inconveniente.

Tener la tarjeta registrada es la única manera de proteger el dinero en caso de pérdida, robo o rotura. Además, permite resolver cualquier inconveniente de forma remota, sin necesidad de hacer largas filas o esperar días para volver a viajar.