River-Boca: así será el operativo de seguridad del Clásico en Núñez

El domingo 27 de abril a las 15.30 tendrá lugar la 264° edición del Superclásico del Fútbol Argentino cuando se enfrenten en el barrio porteño de Núñez el local, River Plate, y Boca Juniors, que llegará al Monumental intentando mantener su condición de líder del Grupo A de la Liga Profesional de Fútbol.

River, por su parte, intentará ganar para recortarle distancias en el Grupo B al puntero, Rosario Central. Cabe resaltar que el Millonario y el Xeneize no comparten la misma zona, por lo que este duelo está clasificado en el certamen como "interzonal".

El operativo de seguridad para el Superclásico entre River Plate y Boca Juniors, será uno de los más importantes del año en el fútbol argentino. Se espera una asistencia récord de más de 85.000 personas. Un foco distintivo de este operativo será que está pensado para prohibir la venta ambulante y que puedan operar los trapitos en la zona. 

¿Cómo será el operativo de seguridad del Superclásico River-Boca?

• Personal asignado: Más de 1.000 efectivos y 120 cadetes de la Policía de la Ciudad, junto con 650 agentes de seguridad privada, estarán encargados de garantizar el normal desarrollo del evento y la seguridad de los asistentes. Además, más de 80 agentes del Cuerpo de Tránsito y Agentes de Prevención del Ministerio fiscalizarán el cumplimiento de las normas de tránsito y seguridad en las inmediaciones del estadio.

• Controles de acceso: Se implementarán tres anillos de control alrededor del estadio. Los asistentes deberán presentar su entrada con código QR, DNI y pasar por un sistema de reconocimiento facial. También se realizarán controles para verificar si los asistentes están incluidos en el Registro de Deudores Alimentarios Morosos, en cumplimiento del artículo 16 de la Ley 269.
• Apertura de puertas: Las puertas del estadio se abrirán a las 12:30. Se recomienda a los hinchas llegar con antelación para evitar aglomeraciones y demoras en los accesos.
• Restricciones y controles adicionales: Desde las primeras horas del domingo, se desplegará un amplio operativo de seguridad coordinado entre fuerzas federales y organismos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El dispositivo incluye cortes de tránsito, controles de acceso en los alrededores del estadio y puestos de asistencia sanitaria.