La Libertad Avanza contra las cuerdas: Usa tácticas dilatorias para frenar leyes clave sobre jubilaciones y discapacidad
A pesar de la clara desventaja numérica en el Senado, el gobierno de La Libertad Avanza despliega una estrategia dilatoria para impedir la sanción de las leyes de prórroga de la moratoria previsional, recomposición de haberes jubilatorios y emergencia en discapacidad, aprobadas en Diputados. La oposición, con los votos necesarios para avanzar, se enfrenta a la llave del oficialismo para retrasar el debate, mientras Javier Milei anticipa el veto presidencial.
La batalla legislativa por la prórroga de la moratoria previsional, la recomposición de haberes jubilatorios y la declaración de Emergencia en Discapacidad se traslada al Senado, donde el gobierno de La Libertad Avanza, a pesar de su minoría, busca frenar el avance de estas iniciativas aprobadas en Diputados. La oposición, impulsora de estos proyectos, cuenta con los votos para sancionarlos, pero el oficialismo tiene un as bajo la manga: la capacidad de dilatar el debate.
"El futuro de la Ley de Discapacidad y de jubilaciones depende de la presión social", advierte una fuente del Senado, anticipando la estrategia del gobierno de Javier Milei, quien ya prometió vetar cualquier medida que ponga en riesgo el equilibrio fiscal. El miércoles pasado, la oposición logró un triple triunfo en Diputados, pero en las filas libertarias se asume que el veto no será gratuito y generará una nueva ola de movilizaciones.
El propio Presidente, a través de sus redes sociales, envió un mensaje a los senadores:
Esperemos que los senadores no apoyen esta demagogia populista pero de cualquier forma nuestro compromiso es vetar cualquier cosa que atente contra el DÉFICIT CERO.
— Javier Milei (@JMilei) June 5, 2025
Fin.
Panorama adverso para Milei en el Senado
En el Senado, la situación es aún más complicada para Milei. El oficialismo cuenta con apenas seis bancas, frente a las 34 de Unión por la Patria. A esto se suma la falta de alineamiento unánime de la UCR y el PRO con el oficialismo en Diputados, lo que anticipa un escenario similar en la Cámara alta.
Ante esta desventaja numérica, la única salida para La Libertad Avanza es dilatar el debate. La señal ya fue enviada: los proyectos, aprobados en la madrugada del jueves, aún no habían sido girados al Senado este lunes. "Lo van a estirar como chicle", afirmó una fuente de la bancada que conduce José Mayans.
La estrategia dilatoria se basa en el control de las comisiones clave. Se da por descontado que los proyectos pasarán por las de Presupuesto y Hacienda, presidida por el libertario Ezequiel Atauche, y la de Trabajo y Previsión Social, presidida por la bullrichista Carmen Álvarez Rivero. El oficialismo podría intentar frenar el debate en esta instancia, impidiendo que el tema llegue al recinto.
A diferencia de Diputados, el Senado no cuenta con la figura de "emplazamiento a las comisiones", lo que dificulta a la oposición forzar el debate. La alternativa sería llevar los proyectos al recinto para ser tratados "sobre tablas", lo que requiere el aval de los dos tercios de los votos presentes.
La presión social, clave para el desenlace
"Apuro no hay", reconocen fuentes libertarias sobre el ritmo del debate en el Senado. La postura de la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien siempre ha defendido el funcionamiento de la Cámara, y los acuerdos que mantiene con bancadas "dialoguistas", podrían verse afectados si apuesta por maniobras dilatorias.
Sin embargo, la principal apuesta del oficialismo es ganar tiempo, esperando que la presión social de los sectores afectados (jubilados y personas con discapacidad) y la opinión pública, sea insuficiente para forzar el tratamiento de los proyectos. El futuro de estas leyes, por lo tanto, dependerá de la capacidad de movilización y la fuerza de la demanda ciudadana.
